El Dr. Giovanny Alvarado, Cirujano Plástico de la ciudad de Cali, Colombia, ha dedicado los últimos 10 años a estudiar Nutrición y estilo de Vida Saludable con el propósito de ayudar a sus pacientes más allá de las cirugías.
Los suplementos recomendados son:
- Vitamina D
- Zinc
- Vitamina C
- Equinácea
- Factores de Transferencia
Nuestro Sistema Inmunológico comprende un conjunto de células ubicadas en diferentes partes del cuerpo, encargadas de detectar y combatir cualquier agente infeccioso que entre en nuestro organismo y amenace la salud.
Cuando un agente infeccioso como un virus entra al cuerpo, el sistema inmunológico detecta este agente como un cuerpo extraño llamado antígeno. El antígeno es identificado por los macrófagos quienes lo capturan y lo destruyen entregando parte de este agente infeccioso a los linfocitos de tipo T, estos linfocitos producen sustancias llamadas citoquinas que llaman a otras células del sistema inmunológico e inician un proceso de inflamación en el sitio donde se encuentra el agente infeccioso. También entregan información a los Linfocitos B para que produzcan sustancias que bloqueen el agente infeccioso, llamadas anticuerpos. Los anticuerpos van a permitir que el agente infeccioso sea bloqueado de manera más rápida y efectiva la próxima vez que entre en contacto con las células de defensa.
Este pequeño resumen del proceso inmunológico se menciona para explicar que la respuesta inmunológica es compleja pero puede ser optimizada de múltiples formas. En este articulo vamos a recomendar los siguientes cinco suplementos que han demostrado ser efectivos en estimular, aumentar o potenciar la respuesta inmunológica.
1 – VITAMINA D
La principal fuente de Vitamina D es nuestro propio cuerpo quien puede fabricarla con la acción de los rayos solares.
Se ha encontrado que la Vitamina D aumenta la función de los macrófagos y activa la producción de sustancias que atacan los virus en el sistema respiratorio, previniendo las infecciones respiratorias.
En condiciones de poca exposición al sol es muy probable que tengamos un déficit de Vitamina D, lo que hace necesario tomar un suplemento de Vitamina D, la dosis de Vitamina D debería calcularse según los niveles de esta Vitamina en sangre. Sin embargo, el costo de este estudio o la dificultad para acceder a él nos obliga a optimizar preventivamente los niveles de esta vitamina tomando 5.000 unidades al día de Vitamina D3, por lo menos durante el período en que podamos estar más expuestos a una infección.
Si podemos medir los niveles de nuestra Vitamina D, el suplemento debería tomarse hasta obtener niveles entre 40 y 60 nanogramos por litro de sangre.
2 – ZINC
Los alimentos más ricos en zinc son las ostras y almejas. Le siguen la carne de res y de pollo. También lo encontramos en las almendras, la avena, el germen de trigo, el maní, los quesos y los huevos.
El zinc es importante para el desarrollo y mantenimiento de las células del sistema inmune. Permite que los leucocitos produzcan “Especies Reactivas de Oxigeno” (ROS) que son moléculas de oxígeno inestables por tener un protón extra el cual se transfiere a las proteínas de los virus y las bacterias dañando las mismas y matando el germen agresor.
El Zinc también aumenta la cantidad de células asesinas naturales que matan las células infectadas por virus y las células cancerígenas.
A nivel pulmonar se ha visto que la suplementación con Zinc puede disminuir la severidad y duración de las infecciones respiratorias porque disminuye la posibilidad de que el virus entre a la célula.
La dosis sugerida de Zinc es de 30 miligramos por día dividido en dos dosis.
3 – VITAMINA C
La vitamina C puede encontrarse en mayor cantidad en la frutas cítricas como la naranja, limón y mandarina, pero el Kiwi es una de la frutas con más alta concentración de vitamina C.
La vitamina C apoya el sistema inmune de diferentes maneras. Se puede acumular en los neutrófilos mejorando su capacidad para captar y matar virus.
Se ha visto también que aumenta la proliferación de linfocitos T y B, mejorando la respuesta del sistema inmune. Estimula los macrófagos quienes atrapan las células infectadas por virus disminuyendo la capacidad de replicación del virus.
Aunque para suplir las necesidades diarias de Vitamina C bastan 100 miligramos al día, la dosis recomendada para mantener buenos niveles de Vitamina C que mejoren significativamente el sistema inmune es de 500 miligramos a 1 gramo por día.
4 – EQUINÁCEA
La equinácea (echinacea purpurea) es una planta medicinal originaria de Norteamérica, cuyas flores de color púrpura o rosácea son semejantes a una margarita.
Se ha visto que los extractos de equinácea estimulan la inmunidad disminuyendo la intensidad y duración de las infecciones por el virus del resfriado común.
Se han demostrado efectos antivirales y antibacterianos producidos por el aumento de la movilidad de los neutrófilos y de la producción de células asesinas naturales. También estimula la producción de citoquinas y la actividad de los macrófagos.
La dosis recomendada es de 250 miligramos al día. Aunque puede usarse en forma de infusiones a partir de las flores o de las raíces secas, es importante tomar una preparación estandarizada en forma de cápsulas.
5 – FACTORES DE TRANSFERENCIA
El sistema inmunológico tiene la capacidad de aprender de las infecciones previas de tal manera que cuando entra nuevamente en contacto con el mismo agente infeccioso es capaz de responder tan rápidamente que no nos damos cuenta por qué no nos enfermamos.
Esta información que ha adquirido el sistema inmunológico puede ser transmitida de madre a hijo a través del calostro de la leche, en el caso de los mamíferos o a través de los huevos en las aves. Los factores entregados a la descendencia se denominan FACTORES DE TRANSFERENCIA e incluyen no solo la información para reaccionar ante los agentes infecciosos formando rápidamente anticuerpos sino que también ayudan a modular o moderar la respuesta inmunológica para que una vez completado el proceso de defensa , este proceso puede ser detenido oportunamente para que no produzca daño en los tejidos del propio organismo.
El papel de los Factores de Transferencia es el de educar y alertar sobre un peligro potencial a las células del sistema inmune que no cuentan aún con esta información, permitiendo el curso más leve de una infección.
Los Factores de Transferencia pueden acompañarse de otros compuestos naturales que también estimulan el sistema inmunológico como los hongos medicinales, entre los cuales se resaltan el Sen Su Take (Agaricus blazei), Cordyceps Sinensis y Maitake.
Es importante tener en cuenta que la respuesta inmunológica requiere de una modulación o autocontrol para que no termine afectando al propio organismo y perpetuando un proceso inflamatorio. Cuando hay una falla en esta modulación se pueden generar enfermedades llamadas “autoinmunes” donde el cuerpo desconoce sus propios componentes y termina atacándose a si mismo. Las enfermedades autoinmunes más conocidas son la Artritis Reumatoidea y el Lupus.
En pacientes con enfermedades autoinmunes no se recomienda tomar suplementos que estimulen la inmunidad ya que ellos reciben normalmente medicamentos que hacen todo lo contrario.
Antes de tomar alguno de estos suplementos es importante consultar con su médico de confianza.
Evite la automedicación en especial si usted esta enfermo o cree tener una infección activa.